En el desarrollo psicosexual, el tema de la educación sexual es amplio, sin embargo es importante mencionar el funcionamiento de las diversas partes que lo componen, asi como funciones y desarrollo en el hombre y la mujer, como el sistema endocrino que juega un papel fundamental en el proceso de maduración sexual y reproductiva, así como en regular del deseo y funcionamiento sexual.
La conexión que tiene el sistema endocrino y el cerebro ejercen un efecto combinado sobre la coordinación de las emociones humanas y el comportamiento sexual, existiendo seis glándulas de secreción interna; la hipófisis, la tiroides, la paratiroides, el páncreas, las suprarrenales y las gónadas, estas ultimas son los testículos del hombre, y los ovarios en la mujer, existen entre ellas algunos restos de secreción, en la circulación sanguínea, las hormonas tienen efectos profundos sobre el cuerpo o sobre alguna función específica del mismo.
Estas concentraciones hormonales se mantienen por medio de diversos sistemas sensitivos de control llamados, sistemas de retroalimentación, el encéfalo ejerce influencia vital sobre la función o disfunción de las emociones humanas y del comportamiento sexual, el hipotálamo, que forma parte del cerebro, también funciona como glándula, ya que produce hormonas.
Conocer acerca de la actividad hormonal donde el desarrollo del sistema sexual en el ser humano es complicado, los órganos sexuales de ambos sexos, se originan en la misma estructura anatómica de masas celulares, la diferencia entre hombre y mujer resulta de las señales hormonales por el patrón cromosómico especial establecido en el embrión durante la concepción.
La sexualidad sufre desequilibrios en la vida adulta, donde una cantidad excesiva de andrógenos en una mujer, y estrógenos en los hombre, pueden provocar cambios notorios en las características sexuales secundarias. Por ejemplo, los hombres que reciben estrógenos antes de ser sujetos a cirugía transexual presentarán crecimiento de senos, depósito de tejido adiposo y encogimiento testicular; una mujer con exceso de andrógenos se vuelve varonil.
Diferenciado del hombre, en la mujer sirve para aumentar el apetito sexual, aunque tiene algunos; efectos masculinos como; estimular el crecimiento del vello facial, pero después de la pubertad las hormonas masculinas y las femeninas no realizan influencia alguna sobre la masculinidad o feminidad del individuo, en el curso del desarrollo psicosexual.
Los cambios físicos que sufren los jóvenes durante su desarrollo de los sistemas masculino y femenino ocurren durante la pubertad. Ésta es la etapa de la vida en la que las características sexuales (aquellos rasgos sexuales que definen a los dos sexos) comienzan su desarrollo y la reproducción se vuelve posible. Esta fase del desarrollo está precedida de modo directo por un periodo de rápida maduración, que se conoce como pubescencia (llamada también ciclo de desarrollo púbico). Los cambios que se presentan en este periodo son producidos por las hormonas gonadales: los andrógenos y los estrógenos.
Donde las glándulas sexuales maduran y las diferencias funcionales entre los sexos se vuelven más notorias. La química del cuerpo y el aspecto físico y funcional se vuelven más hacia lo femenino o lo masculino. A medida que estas diferencias se ensanchan, una muchacha queda dispuesta como mujer y un niño ha entrado en la hombría.
Durante la pubertad hay un incremento y una mayor preocupación por los hechos sexuales, lo mismo que un cambio de intereses, actitudes y emociones; aunque esto no quiere decir que los niños menores no manifiesten deseos e inquietudes sexuales. Siendo un periodo en el que se enfrentan reacciones encontradas en ambos sexos. La experimentación física y una nueva complacencia, la masturbación, ocurren cada vez con mayor frecuencia entre ellos. Los órganos internos, en los conductos mesonefricos, para que se desarrollen necesitan que los testículos fetales produzcan por menos dos hormonas:
1) Una que inhiba el desarrollo de los conductos de Müller, llamada sustancia Jost. 2) otra que estimule el desarrollo de los conductos de Wolff, es decir, la testosterona, la cual tiene que ser interceptada por la proteína citosólica nuclear receptora de andrógenos (determinada genéticamente).
Para actuar sobre los conductos antes mencionados, los conductos mesonéfrieos o de Wolff van a dar origen al epididimo, el conducto deferente la vesícula seminal y el conducto eyaculatorio.
Los órganos externos, estos órganos sexuales externos pasan también por una etapa en la que no es posible distinguirlos como masculinos o femeninos. A partir de la cuarta semana se desarrolla un tubérculo genital. Pronto aparecen a cada lado de esta membrana, tumefacciones labioescrotales y pliegues urogenitales. Los órganos sexuales externos de varones y mujeres se ven muy semejantes hasta el final de la novena semana. La forma final no se establece sino hasta la decimosegunda semana de gestación.
En el hombre El desarrollo de los órganos sexuales pélvicos externos masculinos: La masculinización de los órganos sexuales externos indiferentes se provoca a partir de los andrógenos producidos por los testículos fetales. La testosterona se transforma en dihidrotestosterona, (determinada genéticamente).
El desarrollo de los órganos sexuales pélvicos externos femeninos: Los órganos sexuales externos femeninos son menos complicados, se desarrollan con lentitud que los genitales masculinos. A falta de andrógenos ocurre la feminización de los órganos sexuales externos indiferentes.
La raíz genital va a dar origen al clítoris, los pliegues urogenitales se transformarán en los labios menores y las tumefacciones labioescrotales darán origen al monte de Venus y los labios mayores. La vulva, es el nombre compuesto que se utiliza para nombrar al conjunto de órganos sexuales femeninos externos, al igual que el término pudendo. De manera interesante, este término deriva del latín pudere, que significa avergonzarse, lo cual refleja de modo claro los conflictos emocionales tan a menudo asociados con el sexo en el transcurso de los siglos.
Asi pues al conocer un poco acerca de las funciones y desarrollo del sistema endocrino y demás, los jóvenes experimentan una serie de sensaciones comunes por las que atraviesan en la etapa de la pubertad acerca de su sexualidad, donde también es importante considerar que asi desde niños van descubriendo su sexualidad y creciendo, conociendo una serie de estereotipos, mitos y tabues, en la televisión, y en su entorno, que van distorsionando su aprendizaje acerca de este tema tan amplio e importante se conozca con claridad sus orígenes asi como causas y efectos.
El mito vienen siendo ideas sin fundamentos que en muchas ocasiones, socialmente puede ser aceptada y muchas veces no tienen razón alguna, los estereotipos, son creencias de características y habilidades de ciertas personas utilizadas negativamente, y los tabú es, un termino aplicado a personas o cosas con las que se prohíbe todo tipo de contacto al ser consideradas.
Manifestándose asi la sexualidad, siendo la guerra contra si mismo, y entre ambos sexos, el hecho de pertenecer a una sociedad donde se reflejan las conductas que se adoptan por esta información errónea que recibimos da la pauta para asumir un papel sexual, ya sea un estereotipo masculino o femenino.
El tabú nos lleva a adoptar una conducta fuera de nuestra capacidad de comprensión y aceptación o conducta señalada como fuera de lo normal, ya sea el tema de la masturbación, homosexualidad, relaciones sexuales durante la menstruación, zoofilia, sadomasoquismo, violaciones etc. Estos temas provocan silencio entre las familias y en toda sociedad. Mantener los mitos y tabúes implicara seguir viviendo en plena ignorancia, limitando el conocimiento y permitir que sigan en la mente de la niñez y jóvenes de nuestro entorno.
El tema del desarrollo psicosexual, siendo un elemento esencial, hoy en día en nuestra sociedad, algunos autores como Sigmund Freud ampliaron esta concepción de la sexualidad humana, idea revolucionaria en su época.
La sexualidad tema de gran relevancia que al ser sana y libre es consideración y criterio de cada persona, el tema de la sexualidad debe ser tratado con respeto y claridad, dando cierta libertad y responsabilidad de elegir y decidir, de acuerdo con la pareja, cuando los jóvenes halla tomado cierta madurez, de practicar o no, algunos de estos comportamientos, con ayuda de la investigación acerca de la sexualidad, ayudara a aclarar ciertas dudas o creencias que nos han limitado el libre disfrute de la sexualidad y a no expresar el deseo sexual de cada individuo.
Asi pues, buscando nuevas alternativas para educarlos en cuanto a sexualidad se requiere un acercamiento hacia los jóvenes iniciando en el seno del hogar, para después trasmitir en la escuela ese conocimiento teórico que ayude a su buena formación, y fomentar después una sexualidad sana y responsable.
